Cd. de México (07 octubre 2021).- Con la nueva administración en la Consar revivieron los riesgos de que las Afores sean usadas por el Gobierno para financiar sus megaobras y de que algunas Administradoras privadas desaparezcan del mercado por el tema de las comisiones, alertan expertos.

Explican que las Afores podrían verse obligadas a invertir en los grandes proyectos de infraestructura del actual Gobierno federal como el Tren Maya y la refinería Dos Bocas, además de acatar un piso demasiado bajo de comisiones con la nueva administración en la Consar.

Iván Pliego, quien saltó de la Afore pública PensionISSSTE a ser la máxima autoridad administrativa de la Comisión Nacional del Sistema de Ahorro para el Retiro (Consar), puede modificar el régimen de inversión de las Afores para establecer uno de corte obligatorio en el portafolio para bonos de infraestructura pública, advirtió Federico Rubli, socio-consultor de MAAT Asesores.

También puede manipular el nivel de comisiones que cobran las Afores e imponer por decreto una cuota que podría ser demasiado baja para la lógica de estructura de costos en los que incurren cada una de las Administradoras, lo cual sacaría del mercado a las Afores chiquitas, aseveró el economista.

La Secretaría de Hacienda ya confirmó que el nuevo rumbo a seguir por la Consar en las Afores será favorecer la inversión en los proyectos productivos del País.

La especialista en pensiones y Afores Verónica González explicó que favorecer los proyectos productivos se refiere principalmente a direccionar a las Administradoras a que inviertan el dinero en los proyectos que el Gobierno proponga.

"Esto tiene el mismo grado de preocupación que lo de las comisiones porque lo que puede hacer la Consar es cambiar el régimen de inversión, lo puede modificar de tal forma que pueda establecer una inversión obligatoria hasta cierto porcentaje para las Afores en bonos de infraestructura pública, estoy pensando en los proyectos del Presidente que van a necesitar recursos: Tren Maya y Dos Bocas", dijo Rubli Kaiser.

Recordó que las finanzas públicas vienen muy apretadas para 2022 y estarán todavía más apretadas para 2023, por lo que se les puede hacer atractivo obligar a las Afores a financiar con un cierto porcentaje de su cartera de inversión estos proyectos mediante bonos de infraestructura pública.

La Junta de Gobierno tiene la capacidad de, por decreto, poner una comisión demasiado baja si no le parecen adecuadas las propuestas de las Afores para el próximo año.

"Quizá tres, cuatro Afores de las más chiquitas no van a aguantar lo que por decreto les quieren imponer de comisión y simplemente van a perder viabilidad y hasta rentabilidad.

Simplemente van a cerrar", comentó.