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La Especialista Zaira Romero López, titular de la Clínica del Sueño del IMSS, dijo que entre los padecimientos más frecuentes están insomnio, apnea obstructiva del sueño, trastornos asociados al sueño REM y parálisis del sueño.
Hizo un llamado a atender la salud del sueño como un elemento prioritario para lograr una vida saludable; procurar dormir de 12 a 14 horas en el caso de niños y de 8 a 9 horas diarias los adultos.
Atender oportunamente un trastorno del dormir ayuda a evitar afectaciones a la salud a nivel cardiovascular, alteraciones metabólicas, debilitamiento del sistema inmunitario y trastornos neurológicos como demencia, depresión y ansiedad, alertó la doctora Zaira Romero López, neumóloga especialista en medicina del sueño del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS).
“Todo eso se puede evitar, incluyendo también el reforzamiento del sistema inmunitario. Dormir refuerza mucho el sistema inmune y la falta de sueño hace que un rendimiento académico o laboral no sea adecuado si no hay una buena calidad del sueño.
Esto puede afectar a la persona, a sus actividades tanto laborales, profesionales y a nivel personal, ya que si son pacientes que no duermen adecuadamente pueden verse afectadas sus relaciones interpersonales, con su familia y su entorno en general”, señaló.
Para realizar el diagnóstico, Romero López indicó que los pacientes son monitoreados durante las horas de sueño y se evalúan síntomas como alteraciones en la capacidad para dormir, dificultad para conciliar el sueño, excesiva somnolencia, ronquidos, cansancio crónico, lo que puede derivar en afectaciones en diversos órganos, a nivel metabólico y cardiovascular.
Señaló que el tiempo recomendable para dormir es de 12 a 14 horas en el caso de niños en edad escolar; de 8 a 9 horas los adultos y para los adultos mayores es ideal tomar siestas durante el día para compensar el sueño profundo que se va reduciendo con los años.