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Las casas más importantes de lujo siguen en una eterna luna de miel con la mezclilla, pues se declaran fervientes enamoradas de este material tan azul que nació en las minas de los Estados Unidos para resistir trabajos arduos.

El denim, de esta manera, irrumpe en la década de los años 30 cambiando la forma de vestir en todo el mundo, y hoy sigue desfilando, orgulloso, en las principales pasarelas del planeta que aman su democrático y cómodo encanto.

Porque esta industria representa el 11 por ciento del mercado global de la moda, y a través de estos años se continúa desarrollando gracias a nuevos procesos tecnológicos sostenibles y de automatización que han transformado la forma de crearla, ayudando al mismo tiempo a proteger el medio ambiente.

En la pasada feria Colombiatex, donde se dieron cita 63 empresas destinadas al desarrollo de la mezclilla, se rindió tributo a este material en el ya conocido "Denim Day", durante el cual miles de asistentes y expositores pintaron el recinto ferial de todas las gamas de azul con jeans, camisas, faldas, chamarras y accesorios.

Además, la casa textilera más grande de América Latina y tercera más grande del mundo, Vicunha, presentó las tendencias que influirán en la moda en las próximas temporadas.

Con este lanzamiento se busca fomentar la sostenibilidad, implementando nuevas formas de hacer, producir y vestir que impacten en una reflexión para un comportamiento de consumo más consciente.

Bajo este concepto, Vicunha busca implementar soluciones a las necesidades del mercado haciendo alianzas con marcas y diseñadores de otros países.

En México colaborará con el diseñador Ángel Grave en sus más próximas colecciones.

"Para nosotros es muy importante que desde su origen la mezclilla que utilizamos sea responsable y amigable con el medio ambiente, y que además cuente con una amplia variedad de opciones de peso, acabados y resistencia.

"También debe ser de fácil cuidado y deben contar con certificados internacionales que avalan sus procesos", comentó el diseñador nacional.

Los consumidores

Según Laura Osorio, especialista en investigación del consumidor de Inexmoda, habrá dos tipos de consumidores:

- Clásico. Busca prendas con acabados sastreados en tonos medios, crudos y suaves.

- Arriesgados. Le interesa lo saturado y vibrante, que se pueda agregar a accesorios.

Lo que se viene

Lorena Botti y Laryssa Ferreira, coolhunters de la marca Vicunha, proponen las siguentes tendencias para la próxima temporada:

Nostalgia festiva

Mezcla de décadas y siempre con toques de fiesta.

Ejemplos:

- Siluetas estructuradas y gráficas de los 50 y 60.

- Jeans muy trabajados y con brillos que remiten a la estética disco de los 70.

- Inspiración en la música electrónica de los 90 y 2000, looks con mucho brillo, pantalones con cintura baja y crop tops. Muy específico para la Generación Z.

Smart city

La sastrería ha aumentado con prendas más livianas y sofisticadas.

Ejemplos:

- La creatividad se impone en divertidos jumpsuit con mucho volumen.

- Los trench coat van ganando terreno en el mundo de la mezclilla.

- La mezcla de lo lujoso, como un blazer bien estructurado, con un pantalón grafiteado del streetwear.

Quiet luxury

Se basa en la concientización de un clóset limitado y la importancia de la calidad de los materiales con una estética sobria y clásica, donde importa el cómo lo mezclas.

Ejemplos:

- Los blue jeans con siluetas básicas como playeras de algodón y blazers más sastreados.

- Los tonos son básicos y van desde los claros hasta el azul crudo.

Post Dopamine

Un boom de colores que nos produzcan alegría y estimule la energía del cuerpo, y por ende renazca el optimismo por tiempos mejores.

Ejemplos:

- Siluetas en tonos cítricos donde predominan amarillo y naranja.

- Cortes arriesgados y divertidos.

- Aplicaciones con un toque neón en jeans, chamarras y accesorios.