Dra. María de Villarreal

Dra. María de Villarreal

Dra. María de Villarreal

Fotografía Pablo Huerta

Video Raúl Castillo/Rach Cruz

De visita en la capital del Estado, en entrevista exclusiva con Revista STATUS, la doctora María de Villarreal, presidenta del Sistema DIF Tamaulipas, nos comparte como ha sido el proceso de adaptación y trabajo en estos poco más de dos meses desde que tomó la importante encomienda de velar por el bienestar y sano desarrollo de las y los tamaulipecos.

Doctora de profesión, María de Villarreal comparte junto con su esposo, el gobernador Américo Villarreal Anaya, el sentido de un gobierno humanista para tener la esperanza de un mejor futuro.

Doctora ¿cómo está?

Muy contenta de recibirlos en el DIF, la casa de todos los tamaulipecos.

¿Cómo la han recibido los niños, los adultos mayores y todas las personas que atiende el DIF?

Hemos sentido mucho cariño, una respuesta muy hermosa tanto de los adultos mayores en las Casas Club, en el Asilo y en las Villas Amor, todos son muy hermosos, muy cariñosos y están muy contentos de que sigamos atendiéndolos y conviviendo con ellos todo el tiempo.

Los niños son un encanto, en la Casa Hogar me reciben siempre muy contentos, soy su abuela y estamos muy felices, cuando estoy trabajando aquí en el DIF y ya llevo mucho tiempo en la oficina, voy a verlos para platicar con ellos, estar conviviendo y que me platiquen sus ilusiones, sus preocupaciones, estamos haciendo una familia muy bonita.

¿Cree que el ser doctora incrementó su sensibilidad para entender los casos de los niños que están aquí con situaciones tan difíciles?

Yo creo que sí, la profesión médica me hace tener cierta sensibilidad y sobre todo observación, cuando los visito veo su comportamiento, su actitud o simplemente la forma en que se desplazan, algo que pudiera ser un síntoma de algo en lo que tendríamos que poner cierto cuidado, ya sea en su salud o comportamiento.

Un ícono de su administración es el colibrí, el ser mensajeros de amor y de paz, ¿cómo fue que surgió esta idea?

Realmente nació en las historias que grabamos durante la campaña, el colibrí siempre ha tenido un significado muy especial en la familia, siempre llegan al jardín de la casa de ustedes, aquí en Ciudad Victoria, nos gusta verlos y sobre todo en la casa de mis suegros, también siempre llegaron muchos colibrís, a mi suegro le encantaban y a mi suegra, inclusive en casa han hecho sus nidos, entonces es muy significativo, además de la leyenda maya del colibrí que es tan especial.

Así que un día hablando de eso en la casa de ustedes, empezó a surgir esto de manifestar más lo del colibrí y a la hora que llegamos aquí al DIF fue un bonito símbolo y enlace con todos los trabajadores, los colores que manejamos tienen su significado especial, ser mensajeros de paz, amor y alegría, y compartirlo con toda la gente que se nos acerca.

¿Cómo ha sido el apoyo de su familia para cumplir con todos los objetivos de esta institución?

No solo en el DIF sino en todo el trabajo del Gobernador, mis hijos siempre han estado cerca, ha sido un cambio muy importante en nuestras vidas que en ciertos aspectos nos ha costado ir adaptándonos, pero todos participan, cada uno tiene su profesión, sus ocupaciones, dos de ellos viven fuera, pero siempre que pueden vienen y nos apoyan.

Cada uno tiene sus fortalezas en conocimiento, en forma de ser y eso es lo que aportan a este equipo que hemos formado. Mi hijo Américo colabora mucho en la cercanía con las personas, en andar llevando apoyos a las comunidades, haciendo avanzadas para dar mejor atención a todos, a él le gusta eso y se le da; mi otro hijo, Francisco, es muy profesional, muy organizado y entonces ayuda mucho con sus conocimientos y mi hija María es muy sensible, le gusta mucho enseñar y participa colaborando con su profesión de fisioterapeuta y de enseñanza del dolor, atendiendo a la gente siempre que pueden darse la vuelta por acá.

¿Cuál desea que sea el legado de su administración?

Que la gente se sienta alegre, que tenga esperanza, que puedan surgir de sus necesidades y de sus emociones y que se sientan con la confianza de desarrollarse tanto económica como emocionalmente y podamos tener una sociedad que se sienta con buenas bases y con esa esperanza de seguir adelante, se presente lo que se presente, y que sepan que ellos tienen esa decisión y esa fortaleza para seguir, seguir con sus familias, seguir conviviendo, atendiendo a los niños, a los adultos mayores y todos en gran armonía.

En los programas de asistencia social, ¿los tamaulipecos encontrarán en usted una aliada?, ¿desde las pequeñas comunidades hasta las ciudades?

Si claro que sí, ahorita empezamos en el Altiplano, así lo prometimos, y qué más quisiéramos que en esta época tan sensible de la Navidad pudiéramos estar con todas las comunidades de las 6 regiones, pero es imposible, entonces iniciamos estas brigadas de cercanía con los más necesitados tanto emocional como económicamente.

Con las brigadas multidisciplinarias en las que están colaborando todas las Secretarías, cada quien hace lo que le corresponde y se responsabiliza de atender las peticiones que nos hacen llegar, tuvimos la oportunidad ahora de esa brigada que inició en el Altiplano, poder cerrarla con una gran posada navideña de alegría y de convivencia y así va a ser, tenemos que poder llegar a todas la comunidades, poco a poco pero es nuestro propósito, vamos a ir a cada región y vamos a hacer estas dinámicas sin descuidar lo que ya atendimos, entonces tenemos bastante trabajo, lo importante es que la gente se sienta sobre todo escuchada y atendida.

Por último, ¿cuál es el mensaje para las familias tamaulipecas en estas fiestas decembrinas?

Básicamente como les he estado diciendo, es estar en familia y tratar de tener armonía, de estar felices dentro de las posibilidades que tengamos, sé que habrá muchos con más carencias, otros en diferente situaciones, pero si tenemos salud tratemos de ver lo positivo, convivir todos en alegría y que definitivamente tengamos la esperanza de un año nuevo mucho mejor para todos los tamaulipecos y que todos en forma conjunta, la sociedad, el Gobierno y el DIF, trabajemos colaborativamente haciéndonos responsables para tener ese Tamaulipas que tanto nos merecemos y que vamos a lograr juntos.

“Los niños son un encanto, en la Casa Hogar me reciben siempre muy contentos, soy su abuela y estamos muy felices”

Dra. María de Villarreal

Presidenta del DIF Tamaulipas