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Emergencia médica

Prevenir también significa conocer primeros auxilios
lunes, 25 de abril de 2022
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Agencia/Reforma

Quizá caminas por la calle y notas que una persona acaba de desmayarse. O tal vez en tus próximas vacaciones atestiguas un accidente en el que hay heridos.

¿Qué puedes hacer?

Si bien lo más importante a recordar es llamar al 911 para pedir ayuda de los socorristas, también es esencial que conozcas los primeros auxilios más básicos, asegura Luis Fernando Rodríguez, coordinador estatal de Prevención de Accidentes de la Cruz Roja Mexicana en Nuevo León.

Tener esos conocimientos elementales literalmente puede significar la diferencia entre la vida y la muerte, añade. Encuentra aquí lo que debes saber.

Antes de una emergencia

Si bien las emergencias sorprenden a todos, es posible tomar medidas para responder a ellas de mejor manera, dice Rodríguez.

Una es preparar un botiquín de primeros auxilios, dice. ¿Los insumos que debe contener? Por lo menos gasas, vendas, guantes, isodine o jabón neutro (para limpiar heridas) y una botella de agua (para irrigar quemaduras).

El kit salvavidas también debe contener aquellos medicamentos que necesiten los miembros de la familia.

"Por ejemplo, si tengo a un familiar que sea diabético, puedo tener insulina, o si es hipertenso, no olvidar incluir sus pastillas".

Prevenir también significa conocer primeros auxilios. Rodríguez sugiere dos maneras: inscribirse a un curso disponible en la comunidad (a través de la misma Cruz Roja u otras instituciones) o bajar la app gratuita Primeros Auxilios de la Cruz Roja Mexicana, la cual presenta instrucciones precisas para distintos escenarios.

¿El otro tip? Conocer los teléfonos de ayuda: el famoso 911 o, números de emergencia de tu comunidad.

Durante la emergencia

El primer y más importante paso a seguir cuando presencias una situación de urgencia es evaluar la zona.

¿Es segura?, afirma Rodríguez.

"Ese lugar donde acaba de suceder el incidente puede contener riesgos que generaron la emergencia en primera instancia. Por ejemplo, puede ser un gas nocivo para la salud o un animal venenoso, o tratarse de un incendio.

Si solo corro a tratar de ayudar sin checar el entorno, tengo el riesgo de que también yo necesite auxilio.

"Si verifico que el área no es segura, es de vital importancia llamar lo antes posible a los números de emergencia para que llegue ayuda especializada".

Una vez que el operador contesta, solicita la mayor información posible sobre el incidente. Esto también subraya la importancia de checar la zona: permite tener más datos para comunicar a los cuerpos de auxilio.

Lo que hay que hacer

¿Qué hacer si el entorno es seguro para acercarse a quien requiere ayuda? Además de llamar a los servicios de emergencia, puedes empezar por lo básico.

"Lo primero es aproximarse al paciente para verificar si responde y preguntarle cómo se siente. A partir de esto, pueden suceder varias cosas", dice el especialista de Cruz Roja.

Explica tres de los escenarios más comunes, con sus respectivas recomendaciones.

1. Si la persona no responde

La prioridad es conocer si la víctima tiene pulso o está respirando.

"A veces encontrar el pulso es complicado. Mi recomendación a la población general es que sólo trate de buscar la respiración.

¿Y cómo me doy cuenta? Es checar si el tórax se expande o se contrae.

"Si noto que el paciente no respira, debo informar al centro de emergencias de esta situación. Esto cambia completamente el enfoque de la emergencia, y a veces hasta la ambulancia determinada para enviar es distinta".

Lo que sigue es administrar RCP (reanimación cardiopulmonar), la cual realmente es una maniobra sencilla, afirma Rodríguez.

El primer paso es colocar a la persona sobre una superficie rígida, como por ejemplo el piso.

"Vamos a colocar una mano encima de la otra sobre el pecho del sujeto", explica, "cuidando de formar un ángulo recto con respecto a nuestros hombros y el pecho de ese sujeto.

Luego, vamos a comprimir rápido y fuerte, a un ritmo de unas 100- 120 compresiones por minuto".

Una forma sencilla de mantener dicho ritmo es utilizar como referencia la canción "Stayin' Alive", de los Bee Gees, expresa el experto. Si realizas las compresiones al ritmo del coro "stayin' alive, stayin' alive, ah, ah, ah, ah" acertarás en la frecuencia.

"La importancia del RCP es la siguiente: como sospechamos que la víctima está en paro, la sangre no bombea. Por lo tanto, lo que busco es bombear esa sangre al resto del cuerpo para evitar que los tejidos empiecen a morir".

Estos tips también aplican en situaciones de ahogamiento.

En tales casos, asegúrate de primero sacar a la víctima del agua, checa si está consciente o inconsciente, si respira o no respira.

En caso de que no detectes entrada de aire, comienza el ahora conocido RCP.

2. En caso de hemorragia

Es importante contener los sangrados lo antes posible, pues pueden llegar a ser fatales, afirma Rodríguez.

"Lo más sencillo para contener las hemorragias es colocar una gasa o un trapo limpio encima, y por trapo limpio me refiero a una prenda lavada y no usada.

Lo que sigue es hacer presión directa.

"En caso de que la hemorragia esté en alguna extremidad, por ejemplo una pierna o un brazo, podemos acompañar esa presión directa con la elevación de la extremidad, o sea, colocar al paciente en el suelo y levantar la pierna o brazo.

Lo que estamos logrando es que al bombeo le cueste más llegar a la parte afectada".

3. En caso de atragantamiento

Este tipo de emergencia necesita ser resuelta de inmediato, pues la víctima puede quedar inconsciente en minutos, es decir, mucho antes de que llegue una ambulancia.

La respuesta correcta es aplicar la maniobra de Heimlich.

"Implica pararse detrás de la persona. Vamos a colocar nuestro puño ligeramente por encima del ombligo del paciente, vamos a cubrir nuestro puño con la mano y vamos a hacer presión hacia adentro del abdomen.

El movimiento es similar al de un gancho (de boxeo): hacia adentro y hacia arriba", explica Rodríguez.

 

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