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Por: José Manuel Zapata
Monterrey, México (25 febrero 2021).- Una niña de 4 años, su amigo de 5 y su papá resultaron heridos tras un ataque a balazos dirigido a un joven en la Colonia Laderas de San Miguel, en Escobedo.
José Armando Pérez, de 27 años, hablaba con un vecino en la banqueta mientras que su hija jugaba con un amigo a unos metros cuando escucharon las detonaciones.
"Se escucharon como 10 detonaciones bien fuerte y todos nos metimos", dijo una vecina.
José Armando fue el único que permaneció en la calle y buscaba desesperadamente a su hija.
Los hechos fueron reportados alrededor de las 22:15 horas del miércoles en el cruce de las calles Loreto y Privada Poza Rica, una zona muy transita por estar a media cuadra de una plaza, en la que incluso había niños y jóvenes.
"Eran dos chavos que venían en una carro negro, pasaron bien despacito y luego comenzaron a disparar", comentó uno de los jóvenes que paseaba en bicicleta cerca del lugar al momento del tiroteo.
El ataque iba a dirigido a Juan Alvarado Loredo Esquivel, de 20 años, quien caminaba por ahí y al escuchar los disparos corrió, pero finalmente fue alcanzado por los proyectiles y quedó tirado en el sitio.
Horas más tarde se reportó su fallecimiento.
Sin embargo, las balas alcanzaron también a la hija de José Armando, identificada como Cristal Scarlet, quien recibió un disparo en la pierna izquierda.
Mientras que al amigo con el que jugaba, identificado como Óscar Leonel, de 5 años, una bala le impactó una mano y le provocó severos daños.
"Le arrancó los dedos de la manita derecha", decía una vecina con la voz entrecortada, minutos después de los hechos.
Los pistoleros huyeron del lugar tras el ataque, que duró poco menos de un minuto.
José Armando resultó con una herida superficial en la sien izquierda, producto de un rosón de bala, pero tomó a su hija y al otro niño para pedir ayuda.
El padre y lo dos menores fueron trasladados en un automóvil por un vecino a una clínica cercana y posteriormente al Hospital Universitario.
El lugar fue acordonado momentos después por policías municipales, mientras que agentes ministeriales y elementos de Servicios Periciales realizaban los trabajos de rigor.