Joe Biden. EFE

Donald Trump. EFE

WASHINGTON, EU

AGENCIA / EFE

Ante el inicio este lunes de la Convención Nacional del Partido Demócrata, las encuestas de preferencia electoral en todo Estados Unidos se han vuelto a poner en la mira.

Aunque todas ellas han mostrado una ventaja en favor del ex Vicepresidente Joe Biden sobre el actual Mandatario, Donald Trump, ha habido discrepancias en las cifras.

Un sondeo de opinión divulgado hoy por la cadena de televisión ABC y el diario The Washington Post mostró a Biden con el 53% de la intención general de voto y a Trump con el 41%.

Además, entre quienes indicaron que estaban seguros que sí emitirían su voto -durante los comicios que se llevarán a cabo el próximo 3 de noviembre-, Biden obtuvo el 54% de la preferencia, mientras que Trump el 44%.

La buena recepción entre el electorado de la senadora demócrata de California, Kamala Harris, designada como compañera de fórmula de Biden, "y el entusiasmo creciente por Biden dominan los retos para Trump en la elección de 2020 por la combinación de dos realidades: sólo el 14 % de los encuestados opina que la pandemia de coronavirus está bajo control y dos tercios indican que la economía va mal", señaló ABC.

Por otro lado, la encuesta de la cadena CNN mostró este lunes que el 51% de los votantes registrados en EU estaban a favor del otrora Vicepresidente y el 42% a favor de Trump.

En dicho sondeo, se obtuvo que el 42% de los estadounidenses aprobaba la gestión presidencial de Trump y que el 54% tenía una opinión negativa sobre su desempeño.

Otra encuesta, divulgada por la firma Gallup, no incluyó preguntas acerca del voto, pero sí encontró que el índice de aprobación para la gestión de Trump estaba rondaba por el 42%.

Asimismo, se apuntó que el 51% de los consultados desaprobaba su trabajo, incluso en el campo de la economía.

A 78 días de las elecciones, las posturas contrarias a la labor del Presidente de la Unión Americana, según Gallup, han llegado al 63% en cuanto a la respuesta ante la pandemia, 62% en relación con educación y sociedad, 57% ante las relaciones con China, y 56% sobre política exterior.

Por su parte, el sitio especializado RealClearPolitics -enfocado en la elaboración de promedios de las principales encuestas- mostró hoy a Biden con el apoyo del 50.2% de los posibles votantes y a Trump con el 42.5%.

Entre las encuestas incluidas en la media obtenida por RealClearPolitics, la de CBS News puso a Biden con el 52% y a Trump con el 42%; la de FOX News calculó 49% para el demócrata y 42% para el republicano.

Todas estos sondeos han sido de alcance nacional. Sin embargo, en EU no son los votantes comunes quienes determinan el rumbo de una elección, sino los electores asignados a cada entidad.

En el Colegio Electoral se necesitan 270 votos para salir triunfador en los comicios.

El sitio 270towin.com ha calculado que, si los sufragios fuesen este lunes, Biden tendría asegurados 278 votos en el Colegio Electoral, en tanto, Trump se haría con 169.

Un total de 91 delegados estarían en condición incierta.

Donald Trump, en la elección de 2016, recibió 3.2 millones de votos ciudadanos menos que la demócrata Hillary Clinton, pero aseguró la victoria con estado suficientes frente a lo necesario ante el Colegio Electoral.

Tan sólo el Distrito de Columbia y dos entidades más distribuyen esos electores de acuerdo con la proporción de votos para cada candidato.

En los otros 48 estados, el candidato que obtiene más votos populares se lleva todos los delegados.

Prueban demócratas con convención virtual

La Convención Demócrata da inicio este lunes a una nueva modalidad virtual de lo que hasta ahora era el mayor espectáculo político de Estados Unidos, y ahora tuvo que convertirse en un espectáculo remoto por la pandemia del coronavirus.

El cónclave demócrata, que antes del coronavirus iba a desplazar a miles de personas a la ciudad de Milwaukee (Wisconsin), se celebrará desde hoy y hasta el jueves en modo remoto desde distintos lugares del país y en salones privados.

Esto, lejos de las convenciones tradicionales de los partidos Demócrata y Republicano que suelen ser un hervidero de personas agolpadas en un estadio, que acababan en ocasiones a puñetazos o callaban a los oradores con abucheos ensordecedores.

En Milwaukee trabajará un pequeño equipo de montadores y productores que coordinarán señales, elegirán planos y compondrán un evento político por entrega que busca dejar claro a los estadounidenses el programa y la visión de la candidatura del ex Vicepresidente Joe Biden y su número dos, la senadora californiana Kamala Harris.

Televisoras de todo el país competirán en atención con servicios de streaming, YouTube y otras plataformas digitales, que por primera vez en la historia serán un canal vital para alcanzar al electorado.

El Gobernador de Nueva York, Andrew Cuomo, una historia de éxito contra la pandemia de Covid-19; el ex Presidente Barack Obama, un maestro en la movilización del voto; el ex Gobernador de Ohio John Kasich, un republicano que puede apelar al voto moderado, o Alexandria Ocasio-Cortez, la nueva promesa del ala progresista, precederán al nombramiento oficial de Biden como candidato, que el 3 de noviembre se enfrentará a Donald Trump por la Presidencia.

Como era tradicional hasta que la pandemia echó por los suelos todos los planes, la elección de la ciudad sede, que se engalanaba especialmente para la convención, era en sí misma una declaración de intenciones.

En este caso, la elección de Milwakee era un intento de atraer al voto blanco del Medio Oeste, el estadounidense desencantado que dio a Trump su inesperada victoria en 2016.

Fuera de la elección se quedaron sedes como Miami (Florida) y Houston (Texas), lugares donde el voto hispano y la diversidad racial hubieran obligado a un mensaje diferente.

No obstante, el hecho de que esta nueva modalidad virtual, para la que se han distribuido equipos de luces y sonido a decenas de lugares en todo el país, se haya convertido en la única opción posible podría dar forma a un mensaje mucho más global.

Trump preparó una "contraprogramación" con eventos de campaña desde hoy y hasta el cierre de la Convención Demócrata.

Además, la campaña del Presidente, comenzó una compras de espacios publicitarios en internet, incluyendo anuncios y mensajes en YouTube y Hulu, para quitarle todo el protagonismo posible a los demócratas.

Queda por ver si un montaje audiovisual sin público, sin aplausos o abucheos, puede despertar el interés de la audiencia y emocionar como en su día hizo un desconocido Obama en 2004 o en 2016 Khizr Khan, padre de un soldado estadounidense y musulmán fallecido en servicio.

Para algunos expertos, el formato de las convenciones está muerto y el coronavirus le es la última muestra de que estas tradicionales puestas en escena no van a recuperarse.

"Están completamente obsoletas, ya no son importantes", aseguraba Susan Estrich, exresponsable de la campaña del demócrata Michael Dukakis en 1988, en un artículo en The Atlantic este fin de semana.

Las convenciones han experimentado una constante caída de audiencias televisivas y, pese a algunos momentos destacables, que ocupaban portadas e informativos, no consiguen monopolizar la atención preelectoral como antes.

No obstante, los demócratas esperan que al menos una cosa no cambie: el impulso en las encuestas y en la aceptación del mensaje electoral entre los estadounidenses.

Las críticas al manejo por parte de Trump de la crisis del coronavirus y de la recesión económica, así como las demandas de más justicia social, centrarán el mensaje demócrata, que debería servir para movilizar al electorado indeciso.

La "subida de la convención", como se conoce al impulso en las encuestas tras el encuentro del partido para formalizar a su candidato, podría poner a la fórmula Biden-Harris por encima del 50 por ciento de intención de voto en el que ya se encuentran y consolidar sus ventajas en estados clave.