Nueva York, Estados Unidos (07 agosto 2020).- La fiscal general de Nueva York, Letitia James, advirtió este viernes a la Asociación Nacional del Rifle (NRA) de Estados Unidos que no podía trasladar su sede a otro estado para intentar escapar de la demanda presentada para buscar su disolución por presunto fraude.

"Para ser clara, ninguna organización sin ánimo de lucro registrada en el estado de Nueva York, incluida la NRA, puede disolverse y mudarse a otro estado sin aprobación de mi oficina o de la Corte Suprema de Nueva York", señaló James por medio de un comunicado.

La fiscal -quien tiene autoridad regulatoria sobre las organizaciones sin ánimo de lucro registradas en la entidad- subrayó que mientras siga en pie la demanda presentada el jueves, "la NRA deberá seguir donde está y responder por su arraigado fraude".

El Presidente de Estados Unidos, Donald Trump, fue de los que sugirió que la organización de defensa de las armas, la cual lo ha respaldado en la Casa Blanca, debería trasladase a otra demarcación, como Texas.

Por su parte, la NRA ha acusado a la demócrata James de actuar por motivos políticos y ha sostenido que su proceder era un ataque "sin base" y "premeditado", razón por la cual se presentó una contrademanda a la fiscal.

La Fiscalía de Nueva York acusó al jefe de la organización, Wayne LaPierre, y a otros tres directivos de numerosas irregularidades y de presuntamente desviar millones de dólares de las arcas del estado para uso personal.

Dichos señalamientos -originados a partir de una investigación que se abrió en 2019- podría poner contra las cuerdas a una organización con más de 5 millones de miembros que ha gozado de gran poder, pero que actualmente ha atravesado importantes problemas financieros y pugnas internas.

Además de recuperar el dinero defraudado, James buscaría la disolución de la NRA, así como impedir que los cuatro acusados individuales puedan volver a formar parte de la junta de cualquier otra organización sin ánimo de lucro en Nueva York.

En 2018, la misma Fiscalía forzó el cierre de la Fundación Trump, una organización sin ánimo de lucro creada por el ahora Presidente, que supuestamente fue utilizada de forma ilegal para apoyar la campaña electoral del republicano.