Tras el cierre del ciclo escolar y el inicio de los calurosos meses de verano, ¿llegó la temporada de vacacionar? Ante la pandemia de Covid-19, la recomendación de especialistas y organismos es la misma: Si no tienes motivos para viajar, quédate en tu localidad.

"Todavía va en ascenso el número de casos y recordemos que muchas (personas contagiadas) pueden ser asintomáticas", señala Jesús Daniel López Tapia, director de la Escuela de Medicina de la UDEM.

Michel Martínez Reséndez, líder del equipo Covid-19 de TecSalud, dice que es importante seguir las instrucciones de la Secretaría de Salud: Salvo que se estén realizando actividades como trabajar, comprar alimentos o acudir a un servicio hospitalario, lo recomendable es no salir.

También, los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades, de Estados Unidos, informan en su página que el viajar incrementa las posibilidades de contraer y diseminar el coronavirus.

¿Qué se puede hacer, entonces, en el periodo de vacaciones que se aproxima? Tradicionalmente, esta temporada marca un cierre de ciclo para los estudiantes y una pausa en las rutinas, señala Paola González Castro, experta en psicología y docente de la UDEM.

Pero éstos no serán meses ordinarios, continúa. La crisis económica desatada por la contingencia, que ha dejado a miles sin empleo o con salarios reducidos, crea un impacto que hace ver la pérdida de las salidas vacacionales como un aspecto mínimo e intrascendente.

No obstante, en medio de este gris panorama y el estrés que genera para muchos otros el esquema de home office y las clases online, es bueno encontrar un momento para disfrutar, añade la psicóloga.

"De pronto, nos hemos olvidado del disfrute que es necesario y que no forzosamente se tiene que estar en una playa para sentirlo. Existe un disfrutar en simple y sencillamente desconectarse del trabajo".

La sensación de relajación, paz y tranquilidad se puede encontrar en casa y con la familia, ya sea en un día dedicado a no hacer nada o en actividades como caminar por el parque junto con los seres queridos, dice.

En resumen, se puede hallar todo el gozo de unas vacaciones en las cosas que antes se hacían de manera rutinaria e inconsciente.

Campamento en la casa

Tras el reciente cierre del ciclo escolar, los papás seguramente piensan en qué actividades pueden realizar sus hijos durante estos meses de vacaciones.

Y es que la contingencia sanitaria hará difícil que los tradicionales campamentos de verano se lleven a cabo.

Pero esto tampoco significa que se ha perdido la oportunidad de brindar a los niños actividades formativas, indica la psicopedagoga Priscila Medina Regalado.

"De manera general, los campamentos nos permiten mantener una estructura y estimular a nuestro niño en sus áreas de oportunidad y en sus talentos.

Esto es algo que por supuesto los papás pueden seguir haciendo en casa.

"Lo primero que podemos hacer es volver a tocar el tema de la situación y explicar cuál es la realidad de nuestra familia. Es decir, si mamá y papá van a seguir trabajando, hay que explicarlo".

De ahí, dice la experta en psicopedagogía, sigue platicar sobre cómo los niños quieren ocupar el tiempo. La respuesta de los pequeños, que conforme crecen tienen intereses más definidos, hasta puede sorprender a los papás.

"Si nosotros, los adultos, vamos a tener la oportunidad de dedicarle una cantidad de horas importante a estas actividades en familia, podemos planear más y más (de éstas) conforme pasen los días.

"Y si vamos a estar trabajando, podemos organizar una agenda donde nosotros les podamos dedicar tiempo exclusivo a nuestros hijos, sin distractores".

Las actividades pueden ser desde dibujar y crear manualidades hasta bailar, jugar un deporte o formar una banda en la que cada quien toque un instrumento.

Los espacios exteriores como los jardines se pueden aprovechar para hacer un picnic o hasta para montar una tienda de campaña. Entre las infinitas opciones también están aprender nuevas recetas de cocina, tomar un curso de otro idioma en línea o aprender jardinería.