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La muerte no me espanta.- Óscar Chávez

Foto: Carlos Figueroa Ramirez
En 2015, Grupo REFORMA publicó una entrevista con Óscar Chávez, que reproducimos hoy con motivo del fallecimiento del cantante.
viernes, 1 de mayo de 2020
Por: Miguel De la Vega
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Agencia / Reforma

Cd. de México (30 abril 2020).- En 2015, Grupo REFORMA publicó una entrevista con Óscar Chávez, que reproducimos hoy con motivo del fallecimiento del cantante.

A sus 80 años, Óscar Chávez es un rebelde con causa. La edad le tiene sin cuidado, lo que le duele, dice, es México. Son las 11:00 de la mañana y ya encendió otro cigarro, para sorpresa de quienes lo escuchan hablar -y cantar, por supuesto- con esa voz de trueno sobre la trova y la política, sobre iTunes y Benito Juárez, sobre el amor y la muerte.

Cuando alguien cumple 80 años, todo el mundo quiere hacerle un homenaje

Sí, pero yo no me dejo.

¿Qué tiene de mágico ese número?

Para mí, nada. Este año cumplo 80, pero eso no tiene nada qué ver con el concierto en el Auditorio Nacional. Es una coincidencia. Los he hecho durante 19 años ¡consecutivos!

Pero, entonces, ¿por qué esa manía de los homenajes? ¿Será que sienten que ya se les van a morir los homenajeados?

Por eso no me gustan. Los homenajes son como epitafios. Jajaja.

Usted todavía tiene planes, proyectos, ganas, ¿cómo le hace?

Trabajando. No se me ocurre otra forma.

¿Así de fácil?

Mientras tengas energía, vitalidad, salud y, sobre todo, cosas qué hacer, estarás vivo. La mejor manera de estar vivo es estar activo.

Hay gente que a los 50 años ya quiere retirarse.

Sí, caray, se abandonan, se jubilan y luego ya no saben qué hacer con su tiempo.

¿Usted nunca ha pensado en el retiro?

¡No, hombre! Eso es propiciar la derrota y el abandono. Hay que seguir haciendo cosas mientras te lo permita la vida.

¿Se murió la trova?

¡No, para nada! Hay gente muy talentosa hoy en día en la trova. Hay buenos compositores, buenos intérpretes, excelentes ejecutantes.

El problema son los espacios.

¿A qué se refiere?

A los espacios para llegar al público. Auditorios, teatros, festivales, la prensa misma... ¡No se diga la radio y la televisión! Trova hay, lo que se necesita son canales para difundirla.

¿Internet no sirve para darla a conocer?

Sí, es una gran herramienta, pero internet no genera dinero. Los cantantes tienen que andar vendiendo los discos en sus presentaciones.

Entonces, ¿seguirá viva?

La trova se defiende sola.

Pero cada vez se escucha menos trova, sobre todo la que habla de temas sociales, de actualidad...

Los medios engañan mucho y lo que hacen es vender música que les deje dinero inmediato. Venden cualquier cosa.

¿Se ha perdido calidad en la música?

Siempre he dicho que hay música buena y música mala, no importa el género. Perdurará la que valga la pena; la que no, solita se va muriendo.

Es desechable...

Pues sí. Es lo que maneja la mayoría de las empresas.

¿Usted tiene cuenta en iTunes?

Sí, pero nunca he comprado nada. Más bien ando viendo cómo defiendo mi trabajo en internet.

¿De qué tiene que defenderse?

Soy de lo más pirateado. Y el problema es que en México es muy complicado defenderte de eso, no hay una regulación. Yo, directamente, no estoy vendiendo nada en la red, pero hay muchos vivos que sí están vendiendo lo que no les pertenece.

Hablando de vivales, ¿qué siente de ver esa Chiapas a la que usted le cantó pintada ahora de verde?

¿Del Partido Verde? No les creo nada. Y a ningún partido: son una bola de mediocres todos.

¿Se imagina a los zapatistas votando por el gobierno de Manuel Velasco?

No, claro que no me los imagino. Siempre he apoyado el zapatismo y lo seguiré haciendo.

¿Alguna vez le ofrecieron ser candidato?

No, jamás, yo me cuido mucho. La música es más importante que la política. Es bastante más amable, rica y divertida que andar buscando un sueldito de diputado.

¿Qué le hace ilusión?

Seguir en lo mío, mientras la energía me lo permita.

¿Hay algo que le duela?

Mi país me duele.

¿Por qué odia los celulares?

Ay, porque son una lata. Enajenan. Afortunadamente, no soy esclavo de ellos.

¿Qué le pasó a la Ciudad de México?

La hicieron pedazos. Tan hermosa que era y ya dejó de serlo. Se ha vuelto imposible vivirla.

¿Por qué?

Porque está mal gobernada. Y no de ahora, sino de muchos años atrás.

¿De qué ha servido que la izquierda gobierne el DF durante 18 años?

Por desgracia, de nada. Nadie cumple lo que promete.

De los 13 sexenios que le han tocado en su vida, ¿con qué Presidente se queda?

¡Con ninguno! Me quedo con Benito Juárez. No me tocó, por desgracia.

¿Él sí sabía cómo hacerlo?

Todos los presidentes hablan de él, pero nadie le aprendió nada. Es terrible. A ningún Presidente se le ha ocurrido emular a un personaje tan querido y tan reconocido como Juárez.

Dígame, ¿el petróleo fue una maldición para México?

El problema no es la riqueza natural del país, sino el mal manejo que se hace de ella. ¡Eso es lo que hace daño! La corrupción es inagotable, no tienen madre.

¿México sigue siendo una letrina?

Sí, y cada vez peor porque nadie asume, nadie toma la responsabilidad. Y no depende de una sola persona el problema, sino del esfuerzo de muchos para mejorar el país.

En este sentido, muchas de sus canciones de los años 70 siguen siendo demasiado vigentes.

Sí, es terrible.

¿Y qué siente?

Podría grabar puras canciones políticas, pero no tiene sentido.

¿Por qué no?

Porque hacerlas sobre personajes determinados las vuelve efímeras. Puedes ayudar a que la gente tome conciencia, pero no resuelves nada.

Pero es bonito ser incómodo, ¿no?

¡Ah, claro! Pero con canciones en las que hagas una reflexión. Por ejemplo, en el recital voy a cantar el poema Alta traición, de José Emilio Pacheco, que es una reflexión seria, dolorosa, que te hace pensar.

¿Eso es lo que busca?

Sí, quiero que mis canciones te lleven a reflexionar, a tomar conciencia. No busco estarle mentando la madre a cualquier personaje.

Que ni se preocupan por eso

Pues no, porque, además de todo, son cínicos. Les gana la risa y hasta te aplauden que los menciones.

Es curioso que todo el mundo le pide canciones políticas, pero en realidad las de amor son lo suyo.

Jajaja. Sí, el grueso de mi trabajo es la canción tradicional mexicana. Pero la verdadera canción popular, que no populachera, conlleva la crítica de lo que sucede en la sociedad.

¿El amor es un infierno?

Entre muchas otras virtudes, sí.

¿Usted está enamorado?

De las canciones.

¿Lo han amado?

Supongo que sí. No se trata de andar comprobándolo.

¿Y qué tal es como amante?

Creo que normal. Nunca he sido extraordinario en ningún aspecto.

¿Cómo vive la muerte?

De la manera más normal. La muerte no me espanta.

Mucha gente le tiene miedo.

Allá ellos.

¿Le gustaría morir en el escenario?

Me da igual. La muerte llega cuando llega.

Cinco datos:

1. Su formación fue como actor. Ganó el Ariel por la clásica Los Caifanes, dirigida por Juan Ibáñez con guión de Carlos Fuentes.

2. Ha grabado más de 100 discos de canción tradicional mexicana, trova yucateca, tango, crítica política, parodia, música infantil y este año sacará uno de sones jarochos.

3. En su concierto del 29 de agosto, hará un palomazo con Panteón Rococó.

4. Las de cajón en sus conciertos son Macondo, Por ti, Hasta siempre, comandante; Perdón y Mariana.

5. En 2011, obtuvo el Premio Nacional de Ciencias y Artes en el área de Artes y Tradiciones Populares.

 

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