REFLEXIÓN DOMINICAL

Antonio Fernández

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Perseverar en el ayuno y la penitencia

…"Entonces Jesús le dijo: Vete, Satanás, porque está escrito: Adorarás, al Señor tu Dios, y a Él sólo servirás"… (Mt. 4, 10)
domingo, 1 de marzo de 2020
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Profetiza el Salmo que exhorta para este tiempo cuaresmal a la constancia y firmeza de permanecer al lado de Jesucristo Nuestro Señor en el momento que Dios Padre permitió al diablo tentarlo; …"Dice al Señor: Tú eres mi refugio, mi fortaleza, mi Dios, en quien confío"… Hoy, primer domingo de Cuaresma se vuelve una vez más a vivir el atribulado camino de la Pasión, crucifixión, muerte y el triunfo de la resurrección de Cristo Nuestro Señor, va ilustrarnos en el necesario cambio que para redimir la humanidad del pecado estableció en el mundo.

Dios Padre muestra a los tiempos en el rio Jordán cuando su voz venida del cielo decía; …"Este es mi Hijo, el Amado" …Como a Dios es imposible tentar, como hombre vivió y venció la tentación para hacernos ver como la perversidad maligna del demonio urdió para intentar perder como lo hizo a nuestros primeros padres, incito su soberbia que despertó el celo de la envidia dijo la serpiente demoniaca; …"Dios sabe que el día en que comáis de él se abrirán vuestros ojos y os haréis como Dios" … Ahondando en este hecho del Génesis apreciamos que nuestros males del alma y del cuerpo inicio por la tentación, por lo que el cristiano católico está consciente de la prueba por la que pasará a través de su vida donde demostrará su fidelidad al mandamiento del Señor, si es o no poseedor del habito virtuoso de hacer el bien; la tentación es la excitación al pecado, sólo con la ayuda de la gracia se podrá retornar al mérito de los merecimientos; la tentación nos rodea, pero se puede desde luego si se quiere hacer el bien a su propia alma será por una firme voluntad detener, contener y retener la tolerancia que inclina al pecado, solamente perseverando en el ayuno y la penitencia se obtendrá el acicate que pondrá el alma en orden para con Dios, aprendiendo que Él siendo hombre enseño a la humanidad de todos los siglos como dominar la mala pasión, la que contuvo y por nuestras debilidades estar siempre alerta a que careciendo de la gracia no se puede reaccionar y se caerá en esa pasión que trastoca el orden del alma para con Dios; el incrédulo al referirse a la tentación como una prueba que Dios manda se le pregunta: … ¿Qué buscas en la vida lujuriosa y deshonesta del mundo? ¿Por qué no te acercas a Él? Por esta insólita equivocación, debiera reconsiderar su error e Cristo Nuestro Señor en la Cruz a suplicar su perdón como lo hizo el buen ladrón; …"Y dijo: Jesús, acuérdate de mí, cuando vengas de tu reino.

Respondió: En verdad, te digo, hoy estarás conmigo en el Paraíso"… Las palabras de Nuestro Redentor al buen ladrón habremos de entender que está diciendo; deja aquí en el mundo los males que causan pena a tu alma y ven a mi lado a la gloria eterna.

La falta de fe en Cristo es la acervada incredulidad que la soberbia diabólica mantiene atada el alma pecadora a su voluntad, a la que obstaculiza pase por la mente reconocer del pecador o del incrédulo el más ligero destello de arrepentimiento o humildad, de amor a Dios y al prójimo, cerrando toda intención del corazón a toda súplica y sí a protestar de sus obligaciones de cristiano católico, así jamás perseverará en dominar las pasiones y de la penitencia así mismo se acorta la distancia entre Dios Nuestro Señor y su alma, pero cuando se deja la vida de pecado expulsando al príncipe del mal, es el esfuerzo de Jesús que debe ser el nuestro, ¿Por qué no hacerlo? Nuestra fuerza espiritual es ayudar a vencer la tentación, ¿Por qué se desprecia? El triunfo y la victoria de Cristo es nuestro, pero envueltos en las discordias de la vida lo hacemos de lado, despreciando la obra de Dios se hace también al prójimo que pide e insiste en su mandamiento amarlo como a Él nos ha amado y amará.


Escuchar la palabra de Dios en los Santos Evangelios obliga el cumplimiento de su mandamiento, aceptar que la enseñanza de su doctrina es el amparo y defensa para identificar, someter y controlar el estímulo de la seducción al pecado, a lo que todo incrédulo que pulula por el mundo dirá:… Bonitas palabras fácil es decir vencer, son expresiones retóricas, la realidad es que nadie las lleva ni las logra, palabras vanas que dicen mucho, pero en los hechos nada son, siendo realistas, los atractivos del mundo están para acoplarse al deseo toda persona … Quien así piensa se le responde; eso que dice y piensa es real, no se niega, porque le faltó decir que a la tentación todos estamos propensos de reaccionar en tiempo, de no hacerse será un grillete atado al corazón; el problema de la tentación no es tenerla, es no dominarla, es tolerarla y no rechazarla en el acto; cuando entra la tentación en la cabeza no se razona porque la persona se encierra en ella se resbala en el corazón y se va al error, el temperamento se enciende y no se ve más allá de la nada, así de fácil se es inducido por impulso a obrar mal; la tentación presenta con engaño los deleites que ofrece, estimulan al gozo y al deleite de lo que se tienen frente a sí mismo no razona ni reacciona se va como toro sobre la vaca en celo, va a lo que quiere sea lujuria, avaricia, gula, vanidad, si a ese momento alguien dijera : ¡Espera! Por la cólera causa de esa impedimento sería capaz de arrebatar la vida a quien da la ayuda; no se aprecia de momento la tentación ni la consecuencia de la infidelidad a Dios, ya que el Señor quiere se le demuestre con hechos el cumplimiento de hacer el bien y evitar el mal, así, el que tiene fe en Dios anhela la vida eterna y la ganará perseverando en la lucha de la vida diaria, deponiendo su tibieza, acordándose que todos los días se peca y sólo la oración repara las faltas y preserva de cometer otras de nuevo.

Por ello, para bien nuestro, una cosa es tener en mente la tentación que puede rechazarse y otra tolerarla hasta convertirla en pecado, el resultado de admitir la tentación que vino del pensamiento a ser obra omitiendo el mandamiento de Jesús; …"Amarás a Dios por sobre todas las cosas"… No se percibe que Dios concede los medios para contener la tentación que el tentador presenta a cada paso de la vida olvidando la oración de Jesucristo Nuestro Señor y continuamente se reza: …”Y no nos dejes caer en la tentación"…
Qué puede ser más importante: ¿Vencer la tentación y poner orden espiritual en el alma? Es necesario decidirse; ¡Sí o No! Nada hay más primordial que dominar la tentación con la ayuda del Señor, el pecador advierte que, de no hacerlo, no podrá salvarse, mientras esto no sucede, a todos lados que va le sigue ese temor convertido en un peso que oprime su pecho y lo hunde.

La solución del pecador esta en actuar abandonando la vida que vive y entender que no solo con desearlo o decir tener voluntad, es necesario entrar en batalla contra quien le hace pecar, vendrán sobre el pecador toda clase de presiones, críticas inimaginables, amenazas, actitudes hipócritas, lágrimas e insultos, sugestiones y falsas promesas, habrá de comprender que se vive en una batalla decisiva de salvación, si en verdad se quiere ganar la guerra entender que el demonio utiliza todas las armas, ya que para él, el fin justifica los hechos, utiliza los instrumentos más inverosímiles e inimaginables para convertir al pecador en perverso donde su maldad no tendrá limite, y cuando deduce el pecador que para superar su situación es acudir a Cristo en la Cruz, debe aprender de su palabra la buena obra, pero la negligencia hace de todas formas que el pecado no se vaya sino se esconda, se aferra y arraigue como la raíz de la cizaña, el diablo se va y vuelve con atractivas incitaciones, Jesús enseña;…"Entonces se va a tomar consigo otros siete espíritus aun mas malos que él mismo; entrados, se arraigan allí, y el fin de aquel hombre viene a ser peor que el principio"… La palabra de Jesús advierte a repasar las maldades del pecador, anima al cristiano católico luchar contra corriente por dejar de lado la tentación, la conciencia acicatea el alma y está pregunta; … ¿Qué debo hacer? … La conciencia reprende: … Con este pensamiento no se va ir a ningún lado, seguirás perdido… La obstinación inclina a fingir acatar solapando su mala conducta porque no hay disposición de cambiar.


¿Cómo vencer la tentación? Jesús nos enseña. Después de recibir el bautismo de Juan en el río Jordán, el Espíritu Santo lo condujo al desierto, Jesús va con premura a entrar en encuentro con el demonio, dice el evangelio: …"Por aquel tiempo Jesús fue conducido al desierto por el Espíritu, para que fuese tentado por el diablo"…Jesús nos enseña:…"Velad y orad, para que no entréis en tentación.

El espíritu, está dispuesto, (está) mas la carne es débil"…Nos dice, no entremos por si mismos en las tentaciones, sino que perseveremos en la oración, el ayuno y penitencia se vencerán las tentaciones.

Entramos a la primera Tentación. ¿Cómo fue que Jesús se preparó? …"Ayunó cuarenta días y cuarenta noches, después de lo cual tuvo hambre"…Jesús no ayunó como era la costumbre de los sacerdotes y demás del templo: de sol a sol, el ayuno de Jesús fue de día y de noche durante cuarenta días.

Cristo nuestro Señor, no tuvo hambre mientras estuvo en alta contemplación, de donde se deduce estaría hablando con el Padre sobre la instauración de la Iglesia, por ello, no fue sino hasta pasados los días que permitió el estímulo del hambre porque no había tomado alimento.

El demonio no sabe si ese hombre es el Hijo de Dios, por lo que se dispone a tentarlo donde cree tiene el punto débil; …"Entonces el tentador se aproximó y le dijo: Sí Tú eres el Hijo de Dios, manda que estas piedras se vuelvan panes"…Así se dispone el diablo contra Jesús.

Viendo al Señor hambriento quiso aprovecharse, su audacia obra la tentación contra Él al que intenta excitar la sensualidad, despertar la soberbia diabólica, el orgullo presuntuoso y la concupiscencia de los ojos, por medio de la riqueza, el poder y goce.

Jesús para salir victorioso contra esta avalancha de tentaciones, se preparó por la oración y el ayuno. Las palabras del tentador son malignas, debieron ser melosas, su voz capaz de quebrar la fe y graciosa para engañar.

En el diablo no hay caridad, nunca la ha tenido ni tendrá, habría convertido las piedras en pan, pero como el diablo nada tiene, ofrece lo que no es suyo, por eso es un inicuo engañador; …"Mas (Jesús) replicó y dijo: Está escrito: No de pan sólo vivirá el hombre, sino de toda palabra que sale de la boca de Dios"…La respuesta de Jesús dio por tierra a lo que esperaba descubrir el diablo, no revela su divinidad, nada hay que muestre haberlo alejado de la voluntad del Padre.

Jesucristo Nuestro Señor ha enseñado, Dios puede sustentar la vida del hombre como Él lo desee y muestra suma confianza en Dios su Padre.

El diablo incita a Jesús, a excederse en confianza, alienta al Hijo de Dios a mostrar orgullo y vanidad inexistente en Él.
Continúa el evangelio:…"Entonces lo llevó el diablo a la Ciudad Santa y lo puso sobre el pináculo del Templo"…El tentador se ha propuesto que Jesús se exceda en confianza para que se contradiga.


Dios permite traslade a su divino Hijo a la parte más alta del templo de Jerusalén. Así como el Padre permitió a los judíos maltratar el divino cuerpo de su Hijo, le permitió al demonio llevarle de un lado a otro.

…"Y le dijo: Sí Tú eres el Hijo de Dios, échate abajo, porque está escrito: Él dará órdenes a sus ángeles acerca de Ti, y te llevarán en palmas, para que no te lastimes tu pie contra alguna piedra"…Dice San Jerónimo:…"El diablo mal intérprete de las Escrituras, interpreta mal aquí el texto del salmista, porque le da el sentido absoluto de la protección milagrosa de Dios, incluso en caso de la temeridad de los peligros; quizá se lo aplica a Jesús como una profecía mesiánica"…Al diablo no le importa hacer el ridículo, ni se meterá en cuestiones complicadas, maestro del engaño va a su fin último, apoderarse por el medio que sea posible de las almas.

Sigue el evangelio; …"Respondió Jesús: También está escrito: No tentarás al Señor tu Dios"…El Señor da a conocer al diablo, tentar a Dios, es exponerse a un peligro sin necesidad y sin motivo, quien se atreve tentar a Dios como lo hace el diablo, no sabe lo que hace, pide a el hacedor de todo lo creado pruebas de su poder divino, lo hace el incrédulo para comprobar la existencia de Dios, haga o realice lo que se le viene a la mente.

Jesús confunde al diablo, no necesita hacer lo que le pide para saber sí es hijo de Dios, no duda de la protección del Padre, no necesita hacer lo que él diablo sabe viene de Dios, no cumplirá caprichos al diablo o al incrédulo que pide pruebas tentando a Dios, bien es depositar fe y confianza en Dios.


…"De nuevo le llevó el diablo a una montaña, y mostrándole todos los reinos del mundo y su gloria"…Vuelve el diablo a prometer lo que no tiene y no es suyo, sus palabras son para inquietar la codicia el ánimo del poder y la riqueza, ofrece con engaños, se asemeja al mal vendedor que vende con dolo lo que no está en venta.

Dios Padre prometió a su divino Hijo la posesión de los reinos de la tierra, refiriéndose a la posesión espiritual de las almas que obtendría por los dolores, sufrimientos y padecimientos en su Pasión Santísima.

El diablo creyendo que Jesús era un hombre con todas las debilidades está seguro de perderlo por la ambición en una afirmación engañosa y mentirosa, el diablo, envanecido soberbio se atreve a ponerse en el lugar de Dios, promete a quien es el dueño de lo que le enseña, es más del universo, de los reinos de la tierra y los honores que de ellos viene, el demonio nada tiene nada de ellos;…"Le dijo: Yo te daré todo esto si postrándote me adoras"… San Jerónimo muestra la contradicción del diablo a lo que pide a Jesús;…"El demonio, sin pensarlo, hace ver claramente con la manera que habla a Jesucristo, que no se le puede adorar (al demonio) ni seguir, sin dar antes una caída muy funesta"…Ha este momento el diablo no tenía certeza de que Jesús es el Mesías, jamás habría dicho, …"me adoras"… Inconcebible, el mal pide al bien lo reconozca como su superior, a quien es el más insignificante de la inferioridad.

Jesús obra, y rechaza con imperio e indignación la propuesta inicua y engañadora del demonio;…"Entonces Jesús le dijo: Vete, Satanás, porque está escrito: Adorarás al Señor tu Dios, y a Él sólo servirás”…Jesús da a conocer al demonio su realidad, lo llama satanás, este entiende que Jesús es su adversario, le ha demostrado que lo conoce, Jesús el Hijo de Dios vino a fundar el reino del bien, y echar fuera el del mal rechazado y expulsado, no lo hizo desde la primera tentación para mostrarnos que Jesús es el reivindicador de la gloria de Dios;…"Dejóle entonces el diablo, y he aquí que ángeles se acercaron para servirle"… He aquí el triunfo de la perseverancia del ayuno y la penitencia.
hefelira@yahoo.com

 

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