LAS VEGAS, EU
/REFORMA
Tyson Fury ya probó el poder de Deontay Wilder: Lo tumbó en dos ocasiones en la primera ocasión que se enfrentaron, diciembre de 2018, y al final todo quedó en un empate.
El británico aseguró que están muy equivocados los que piensan que terminará noqueado el 22 de febrero en la revancha que se montará en el Hotel MGM Grand & Casino de Las Vegas.
"Sí, fui a la lona, pero no me ganó, vio que sus mejores golpes no pudieron terminarme, y sabe que tengo el boxeo, y es lo peor que le puede pasar.
Yo gané esa pelea y él lo sabe. Yo sé cómo hacerle daño, los que piensen que me noqueará están mal, e igual, las personas que piense que Wilder no puede ser noqueado están mal.
"Voy a demostrar el 22 de febrero lo poderoso que soy realmente", expresó.
Fury, de 31 años, está invicto en el profesional, con una imponente marca de 29-0-1, 20 KO's, algo similar a su rival que llega con 42-0-1, 41 KO's.
Al final, los aficionados serán los ganadores, pues se prevé un pleito parejo, tanto que en las apuestas Fury es considerado favorito por muy poco sobre Wilder, quien ostenta el cetro Pesado del Consejo Mundial de Boxeo (CMB).