REFLEXIÓN DOMINICAL
Antonio Fernández
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Abordamos el tema de la Inmaculada Concepción de María que ilustra Antonio Royo y Marín; …"El primero de los grandes privilegios concedidos por Dios a la Santísima Virgen María en atención a su futura maternidad divina, fue el privilegio de su concepción inmaculada" … Sacudidas a lo profundo de sus extrañas del cristiano católico, lo estremece la conciencia, penetrando en él la nobleza del sentimiento de las cosas espirituales, aviva en su interior el dolor y recuerdo de tantas caídas como promesas de ya no volver a caer, lo prometido y no cumplido agita el corazón, siendo muchos los actos que en esta vida efímera ha perdido al mundo y a cada persona de los que quizá muchos se sienten arrojados de la vista de Dios y de su Santísima Madre, angustiados unos, otros pesarosos y algunos abatidos se disponen públicamente o en el silencio profundo de su alma derramar lágrimas de un sufrimiento que ahoga, que aprieta, que oprime, que exprime el corazón de pena, hasta que las lágrimas agobiantes se convierten en sinceras, y anhelantes a encontrarse con la mirada maternal y amorosa de María que mirando a todas partes indaga donde encuentra el hijo perdido, obrando de la misma forma como lo hizo cuando el Niño Jesús se perdió por tres días, reza el Evangelio: …"Al verlo (sus padres) quedaron admirados, y le dijo su madre: Hijo, ¿por qué has hecho así con nosotros? Tú padre y yo, te estábamos buscando con angustia" … María y José al verlo se gozaron encontrarlo porque su problema era no verlo, no saber la razón de su desaparición, no tenerlo a su lado, la preocupación que vivió el corazón de María y de José no hay palabra para expresar el dolor y pena de haberlo perdido, como muchas madres sufren la pérdida de un hijo sea cual sea su edad, es perdida y es dolor que nunca cesa, así Nuestra Madre busca al pequeñín que siendo pecador suspira el cariño de su amada Madre, el arrepentimiento impulsa buscar la mirada consoladora de su aflicción encontrará en su maternal y hermoso rostro el aliento que reanima y tranquiliza, siendo más cuando al venir a la mente su palabra vivificante taladra lo profundo del alma al apreciar en ella como vierte en el arrepentido y en las almas buenas y justas su desbordante amor maternal en el Tepeyac al dirigirse a nuestro pueblo y a la humanidad de todos los tiempos: …"Acaso no estoy Yo aquí que soy tu Madre"…Sólo el alma de fe puede anidar en el corazón que impulsa la palpitación desbordante que despierta la noble pasión que solo ante ella se vive y más cuando su palabra maternal como latigazo fustiga la holgura de las pasiones; …"Anda- Hijo mío- ve y pon todo tu esfuerzo"…Pasando como película por la memoria en detalle todo lo que se hizo y no debiera haberse hecho, se quisiera dar un salto para componer lo que tenemos descompuesto, decir no a lo que se hizo y dar el grito del sincero arrepentimiento: ¡Perdón, Señor perdón! El amor de tan abnegada Madre su mirada desahogada la pena, mirada que hace vivir el confort que de su gracia viene a nuestra alma como si depositará su santísima mano en el corazón y detuviera el furor de la violencia causado con tantas y tantas caídas, en ella es hacer realidad no solo de palabra sino de echo el mandato encomendado por su amado Hijo en el Patíbulo de la ignominia humana: …"Mujer, he ahí a tu hijo, después dijo al discípulo: He ahí a tu Madre"… María sublime y excelsa morada de Jesús.
De donde San Luis María Grignom de Monfort en su obra secretos de María muestra la misericordiosa voluntad de Madre del buen consejo: …"Porqué María es la que ha hallado gracia delante de Dios, ya para sí, ya para todos"…
¿Por qué son pocas las palabras pronunciadas por nuestra Madre la Virgen María en los Santos Evangelios? Porque así fue dispuesta su participación por Dios desde antes de todos los tiempos, así fue preparando el camino para preservarla de todo pecado.
María Santísima pronunció seis palabras escritas en los Santos Evangelios, que al incrédulo le servirá para hostigar contra la madre Dios, al desconocedor y falto de fe descontrolará su estado espiritual propenso a la duda, el de fe por encimita sube sus hombros en señal de que no le encuentra importancia, pero en el alma de fe viva reconoce y acepta el hecho de que todo ello es porque Dios Nuestro Señor así lo ha dispuesto y lo que Él dispone, así será.
Volviendo a los Santos Evangelios donde María Nuestra Madre Inmaculada escucha el anuncio del Ángel San Gabriel:…"He aquí que vas a concebir en tu seno, y darás a luz un hijo, y le pondrás por nombre Jesús"…Continúa el Ángel el mensaje y al terminarlo dijo María; …"¿Cómo podrá ser esto?"… Indica que el propósito inviolable de María es conservar su virginidad.
La segunda: …"He aquí la esclava del Señor: Séame hecho según su palabra"… Manifiesta que su divisa ha sido y será para siempre la obediencia y humildad.
La tercera, María visita a su prima Santa Isabel que está en el sexto mes la que era reconocida estéril fue dado a conocer por el Ángel y ella pronuncia: …"Mi alma magnifica al Señor"…Manifiesta la alegría y gozo por los beneficios recibidos.
La cuarta, Jesús se ha apartado de la vista de sus padres para ir al Templo, desconocedores de ello angustiados preguntan y buscan, enseñándonos que cuando perdamos a Jesús por nuestros pecados vayamos a buscar al Templo donde siempre espera al alma atribulada de los males, al ver sus Padres a Jesús fueron invadidos de gozo, a lo que María su Madre hablo; …"Hijo, ¿Por qué has hecho eso?"… La quinta; …"No tienen vino"… María esclarece al mundo y a los tiempos su compasiva intersección nunca cesara ante su Santísimo Hijo como lo hizo en las Bodas de Canaán.
Sexta y última, María se dirige a los sirvientes de la boda y dispone: …”Haced lo que Él os dijere" … Revela María a la humanidad de los siglos ser la puerta de entrada a su amado Hijo Jesús que nace en el pesebre de Belén, María Santísima recibe en sus benditos brazos del Espíritu Santo al verbo de Dios hecho hombre, lo acerca a su Inmaculado corazón y en el instante se funden en un solo corazón, esto es, el corazón de Jesús va a su Madre, y el de la Madre al de Jesús, así lo que sea gozo, alegría, sufrimiento, o padecimiento en el Hijo, lo será también en ella la obra que Dios Nuestro Señor dispuso para quien hoy reconocemos María la Inmaculada Concepción y el fundirse en un corazón es obra misericordiosa de Jesucristo Nuestro Señor que desde ese momento en los brazos de su Madre predica; …Hijos míos, para venir a Mí, el mejor camino es mi Madre ...
De lo anterior podremos considerar, fue deseo del Señor revelar la obra de la Inmaculada Concepción, siendo una de ellas las palabras de San Luis María Grignom de Monfort: …"Lo digo con los santos: la divina María es el paraíso terrestre del nuevo Adán, donde se encarnó por obra del Espíritu Santo para obrar en Él maravillas incomprensibles.
Ella es el grande y divino mundo de Dios, que contiene bellezas y tesoros inefables. Es la magnificencia del Altísimo, donde ocultó, como en su propio seno, a su Unigénito, y con Él, todo cuanto hay de más excelente y precioso.
¿Oh, qué cosas tan grandes y tan ocultas ha hecho este Dios todopoderoso en esta criatura admirable, como ella misma se ve obligada a confesar, a pesar de su profunda humildad; ¡Hizo en mi favor grandes cosas el poderoso! …El mundo no conoce, es incapaz e indigno"…
A principio del siglo XIV el Franciscano Juan Dunss Escoto inspirado en los teólogos de su tiempo y siglos anteriores, desde luego del mismo San Francisco de Asís ser incondicional devoto de la Virgen Inmaculada, dio solución a las objeciones de los que estaban contra de Inmaculada Concepción de María.
Devoto contemplativo del Señor y María, es comentado el hecho prodigioso cuando expuso la defensa que ha sido base de donde dio principio al dogma de la Inmaculada Concepción, los enemigos de este dogma estaban como lobos feroces a no ceder, a discutir y rebatir, conociendo Juan Dunss la ola de impugnaciones que vendrían sobre él, iba camino al lugar donde estaban reunidos los opositores y al pasar ante una imagen de piedra de la Virgen María se detuvo e inclinado eleva a María esta oración nacida de la profunda fe de lo que defenderá: …"Dignare me laudare te: Virgo Sacrata"…(¡Oh Virgen sacrosanta! Dadme las palabras propias para hablar bien de ti)"… Se narra que la imagen de piedra se inclinó, dispuesto Juan Dunss expuso lo que es para todos los siglos al punto de reflexión y punto de acrecentar el amor de nuestra Madre María Santísima a confirmar en el interior su ser Inmaculado.
El suceso tiene está versión que se ha guardado desde esos siglos como prueba del triunfo Mariano del Papa Pío IX quien declaro dogma de fe la Inmaculada Concepción de María.
Pregunta Juan a sus oponentes; ¿A Dios le convenia que su Madre naciera sin mancha del pecado original? ¡Sí! A Dios le convenia que su Madre naciera sin ninguna mancha.
Esto es lo más honroso para Él. Continua, ¿Dios podía hacer que su Madre naciera sin mancha de pecado original? ¡Sí! Dios lo puede todo, y por tanto podía hacer que su Madre naciera sin mancha: Inmaculada.
Termina su interrogatorio a los que escuchan: ¿Lo que Dios le conviene hacer lo hace? ¿O no lo hace? Todos respondieron: Lo que ha Dios le conviene hacer, lo que Dios ve que es mejor hacerlo, lo hace.
Entonces Juan Dunss Escoto cerrando la controversia exclamó: Luego para Dios era mejor que su Madre fuera Inmaculada o sea sin mancha del pecado original.
Dios podía hacer que su Madre naciera Inmaculada; sin mancha. Por lo tanto: Dios hizo que María naciera sin mancha del pecado original. Porque Dios cuando sabe que algo es mejor hacerlo, lo hace"…Es de imaginar el silencio profundo del auditorio, porque profundo fue el razonamiento que hubieron de discernir y profundo el arrepentimiento de quienes sostenían lo contrario, esto sirva al cristiano católico como punto de firmeza, punto de amor, punto de partida para atraer, guardar y tener en la mente y en todos los sentidos el gozarse de la obra de Dios en la Concepción Inmaculada de María, la Madre de Dios, obra que viene desde antes de todos los tiempos, bueno es tener presente que la obra de Dios al surgir en su mente es cosa hecha, porque en Él nada es improvisado y nada imposible, por ello gracias a la gracia santificante, creemos y aceptamos, la maternidad divina.
Dios preparó el lugar puro donde su Hijo Amado encarnara, demos gracias porque María es la sublime y excelsa morada de Jesús.
El Evangelio que se refiere a celebrar la Inmaculada Concepción, concibe en tres versículos la intensidad del relato de la anunciación, cada uno guarda la belleza y la gracia de María, cada uno muestra la delicadeza y finura que invita al cristiano católico meditar en su contenido y encontrará en ella el camino reservado y piadoso de salvación.
En ellos todo es grande, en menos palabras no podía tratarse con ingenuidad y sencillez el más grave y difícil fruto salvador de la humanidad en su relación con Dios conmemorar el día de la realización de las promesas; …"Al sexto mes, el Ángel Gabriel fue enviado por Dios a una ciudad de Galilea llamada Nazaret"…El mensajero enviado a la pobre casa de los padres de María, Joaquín y Ana, reflexionando y para enseñanza nuestra dominar el ego, exhibicionismo y jactancia apreciando que en el misterio de la Encarnación todo es pequeño: el país, la ciudad de Nazaret, la casa de María, la humildad de la Virgen, de la conversación de dos almas surgidas de lo alto surge la obra más grande y trascendental de la historia humana: La Encarnación del Hijo de Dios en el seno de María, redención y transformación del mundo, reza el Santo; …"La gloria incomparable del reino de Dios en la tierra y en los cielos" ….
Y San Pablo precisa su sentencia: …"Las cosas flacas escogió Dios para confundir las fuertes"…Dios Nuestro Señor planeo y determino cada paso a seguir que el Ángel Gabriel obro al pie de la letra y palabra, así lo demanda la solemnidad del mensaje y la dignidad a quien está dirigido.
En efecto, el Ángel fue enviado a una población quizá la de menos nobleza en Israel, despreciada por su pequeñez con la actitud de los judíos de la gran ciudad de Jerusalén, obvio el menosprecio a Nazaret al saber el lugar donde estuvo el Salvador, para ellos es diminuta nada de especial por ser pequeña, lo que va contra la ostentación y presunción de los judíos que la tenían por una nada, no es de dudar que en sus planes estaba que la venida del Mesías sería en su ciudad capital.
Nazaret es la ciudad donde habito María y el divino Niño Jesús significa "tallo" o "pimpollo”. En ella se guardan celosa y espiritualmente los recuerdos de los años habitó la Sagrada Familia: …"a una virgen prometida en matrimonio a un varón, de nombre José, de la Casa de David; y el nombre de la virgen era María"... El Ángel Gabriel se encuentra ante una doncella humilde que ha sido educada en el templo de Jerusalén, donde había hecho votos de perpetua virginidad.
La humilde virgen estaba desposada, que significa casada según los ritos y formas, pero no se había celebrado la ceremonia nupcial donde se entregaba a la esposa al esposo en casa de éste.
María descendiente de la casa de David como lo era también José, ambos tienen por raíz al gran rey, por ello Jesús es reconocido Hijo de David.
El nombre de María es dulcísimo para el cristiano católico, por eso en la Salve la aclamamos; …"¡Oh dulce Virgen María!"…Su nombre se exalta en las letanías a la Santísima Virgen afirmando ser más las advocaciones de la esperanza de los afligidos, protectora de los arrepentidos.
San Ambrosio, Doctor de la Iglesia y Obispo de Milán, Maestro de San Agustín refiriéndose a la salutación del Ángel a María: …"Es verdaderamente un saludo nuevo y reservado a María"… Hoy el Señor nos manifiesta la perfección de sus obras en todo detalle: la Inmaculada Concepción de María; …"Y entrando donde ella estaba, le dijo: Salve, llena de gracia; el Señor es contigo; bendita tú entre todas las mujeres"… ¿Qué nos enseña el Señor en esta salutación angélica? Repasando cada palabra, precisamente lo que más esfuerzo se requiere para vencer las inclinaciones que nos tienen atados, el corregir, valorar y aprender de la modestia que en todos los órdenes de la vida fue en María.
Es muy difícil controlar el "Yo" cuando alguien obtiene el reconocimiento y más se crece cuando quien da la responsabilidad lo acompaña de elogios, enaltece y adula el logro o éxito de lo que hizo, no siendo nada de esas actitudes donde sólo María es la sublime y excelsa morada de Jesús.
hefelira@yahoo.com
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