El Papa dedicó su mensaje de hoy al inicio para los católicos de la Cuaresma, un periodo que definió como de "competición espiritual para vivir junto a Jesús" y para "vencer las tentaciones del maligno" . Citando el Evangelio de Lucas, que narra como Jesús fue tentado por el demonio, Joseph Ratzinger explicó que las tentaciones de Satanás fueron tres: una sobre la necesidad de bienes materiales, cuando le propone transformar las piedras en pan; el engaño del poder, cuando el diablo le ofrece dominar la creación a cambio de un acto de adoración; y la ambición, cuando le invita a cumplir un milagro espectacular.
"También en nuestros días el hombre conoce la tentación del poder, de la ambición y del hedonismo" , añadió el Papa alemán.
Ratzinger anunció que como es tradicional en la Cuaresma comenzará hoy, junto a sus colaboradores de la Curia, la semana de ejercicios espirituales.